Motor, senderismo y otras maneras de pasar el rato...

viernes, 25 de septiembre de 2020

El Camino del Cid en moto (Capitulo 5º)

"Enviaba a sus jinetes que 
por la noche marchaban
hasta llegar a Cullera y, 
luego, llegar a Játiva,
y marchando más abajo 
hasta Denia se acercaban.
Por las orillas del mar a
 los moros quebrantaban.
Ganaron Benicadell con
 sus salidas y entradas."
Abandono mi hotel, a primerísima hora de la mañana. Las jornadas son largas y el plan que cumplir,  muy apretado para poder visitar tantos lugares, hacer tantas fotos y parar tantas veces la moto. 
Salgo de Valencia sin grandes dificultades, a pesar de que la hora es propicia para encontrar miles de coches en mi camino.
Voy dejando atrás, poblaciones como Sedaví y Benetússer, encuentro a mi paso cientos de hectáreas sembradas de arroz. (Estamos en La Albufera) Nunca había visto así las plantaciones, al no visitar la zona en esta época del año. Siempre lo había visto más verde y en esta ocasión, está ya granado.
Dirijo mis pasos en primer lugar al llamado puerto de Catarroja. 

Es un lugar lleno de encanto, aunque más que un puerto al uso, parece un  simple embarcadero.



Entrando a la población de Catarroja.


Tierra de cítricos. Este es un magnífico campo de naranjos.
Éstas,  aún  están verdes, pero la cosecha se prepara generosa, según parece. 


Población de Manuel, de unos 2.500 habitantes.
Al fondo la ciudad de Játiva
El castillo fortaleza de Játiva, en la Sierra Vernisa.

Entrando en Játiva

Durante el reino de Valencia, Játiva era la puerta natural de entrada desde Castilla, por eso la fortaleza era un punto clave en el control del reino.
Onteniente.
Rodando, rodando, me encuentro de pronto con un paraje precioso. Es El Pozo Claro, en Onteniente
Y es el cauce del Rio Clariano.
Se trata de un lugar de ocio con piscinas naturales y remansos formados durante miles de años y donde disfrutan cientos de personas en los meses veraniegos. En esta ocasión, el lugar se encontraba precintado por la jodida pandémia que nos invade.


Aquí, da comienzo un tramo de carretera, que es una maravilla para ir en moto (que es a lo que he venido, ya que El Cid, era la excusa) 
También es un refugio de aves como el búho real y el halcón peregrino.
Cartel informativo del Pozo Claro (Pou Clar)
Llegando a  Bocairent
Preciosa estampa desde la carretera, del pueblo de Bocairent.

Por esta zona, es indudable que vive alguien al que no le gusta mucho la figura del SIDI.
"Ahora los de Valencia nos han venido a cercar;
si en estas tierras nosotros quisiéramos perdurar
a estos moros firmemente habremos de escarmentar."
Cañada es una población de algo más de 1.200 habitantes situada en el Valle de Biar (Alicante)


En Villena, el Castillo de la Atalaya, su muralla exterior, está protegida por doce torres. Está situado en el Monte de San Cristóbal.
Por la hora que es y por la buena pinta que tiene el lugar, aquí pararé a comer.
Lo hago en Rte. Casa Lola y resulta todo de 10. Trato, comida, servicio y precio BBB

En esta ciudad, nació Ruperto Chapí en 1.851 y en su honor se le puso ese nombre a este magnífico teatro.
Chapí,  fué un excelente compositor de zarzuelas. En el siguiente enlace, puedes escuchar una de las más famosas de dicho autor.
Llegando a Sax, me quedo ensimismado mirando a su espectacular castillo y casi no reparo en el cartel que hay un poco más adelante. (Ese en azul)
SAX, pueblo hermanado con ALAGÓN. ¡Toma ya!!
El castillo de Sax, se alza en una peña de casi 600 metros de altura, en el Valle del Vinalopó, entre Villena y Elda. Los vestigios encontrados, datan su origen íbero, pero la fortaleza actual, es andalusí.

Llegando a Petrer.
En realidad,  he llegado a esta población, sin salir de una calle de Elda. Luego he repasado mis datos y es que juntas forman una conurbación de casi 90.000 habitantes.

Monforte del Cid. Las mejores uvas de mesa (Vinalopó)  y muy buenas canteras de piedra. Ahora, lo que se dice del Cid...

A media tarde, llegando a Elche
Elche.
Y en Elche, palmeras y más palmeras.
Y los Jardines del Huerto del Cura.
Históricamente, El Cid fue desterrado dos veces, la segunda en 1.088. Al conocer la noticia, escribió en Elche sus cuatro famosos alegatos en los que se defiende de las acusaciones de traidor.
En noviembre de 1088, cuando aún no había conquistado Valencia, El Cid se traslada desde Játiva a Onteniente, con el fin de esperar allí al rey Alfonso VI, que se acercaba para socorrer  la fortaleza de Aledo. Los ejércitos nunca se encontraron y el rey Alfonso, desterró por segunda vez  a Rodrigo. El Cid, pasó las navidades en Elche; allí, rodeado de enemigos, decidió no servir nunca más a ningún señor y actuar por su cuenta y riesgo imponiendo su ley hasta Orihuela.
Y hasta Orihuela, también me voy yo...
La patria chica de Miguel Hernandez
Descargo los enseres de la moto y me dirijo al hostal que tengo reservado.
En recepción me dicen que si quiero, allí me sellan el salvoconducto de la ruta.
No había sellado en ningún lugar, desde que el mesonero de Vivar, me lo había entregado. Cuando hice la Ruta de la Vía de La Plata, pase más apuros, para sellar el pasaporte, que para hacer la ruta, pero bueno, así tendría el sello del primer lugar y el del último.
La corneja, se había comportado y todo había transcurrido hasta aquí sin novedad. La Ruta del Cid en moto, acababa de terminar para mí. Ahora falta pasar la noche en Orihuela, y regresar  mañana a  Zaragoza.

Lo de pasar la noche en Orihuela, resultó súper sencillo. Tapeo  y cañas en el paseo y luego una ligera caminata para despejar la mente. Y enseguida a dormir que mañana el camino es largo y aburrido.


No sé si fue la cámara, las cervezas o el pintor que lo dibujó... para mí, que esto está movido!!
Antes de dormir, aún repaso mentalmente los versos de Miguel Hernandez. (Te pongo enlace a J.M. Serrat, que te lo hará más fácil) https://www.youtube.com/watch?v=tL1MQEMim2c

La mañana de septiembre, es radiante en Orihuela. Dan ganas de ir  justo en dirección contraria y pasar unos días de playa, en lugar de emprender ruta de regreso por provincias de Alicante, Murcia, Valencia, Teruel y Zaragoza. Vamos 500 km del ala. ¡¡Casi nada!!
El sol, aún no ha acabado de salir, pero hoy me pilla de espaldas, por lo que no me molestará en absoluto. Aquí acaba la RUTA DEL CID EN MOTO, por lo que a mí respecta. Siento si no he sabido transmitir todas las sensaciones y emociones  vividas, pero eso será una excusa perfecta para que alguno de vosotros, esté dispuesto a realizarla. Saludos cordiales y hasta la próxima.











































 

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